"EL BUEN SAMARITANO"

Universitarios, protagonistas
de un loable gesto solidario

El grupo de universitarios denominado “El Buen Samaritano” realiza un gesto para destacar: dar de comer a pordioseros e indigentes que se encuentran deambulando por las calles de nuestra ciudad. Lo hace todos los viernes por la noche. Su misión es acercar a esas personas un plato caliente de comida y compartir con ellos un momento de sus vidas.

Ellos son jóvenes con muchas opciones por elegir como actividad un viernes por la noche: salir al cine con amigos, ir a bailar, compartir una rica cena en un lugar confortable y con buena música o simplemente estar en sus casas mirando tele, sin embargo, optaron por otra cosa: darse al otro.
Se trata del grupo denominado “El Buen Samaritano” que todos los viernes en horas de la noche, con un carrito y una olla gigante, recorren las calles céntricas de nuestra ciudad acercando un plato caliente de comida a los pordioseros e indigentes.
Los jóvenes se reúnen en el Convento de San Francisco Solano todos los miércoles a las 20 para ‘dibujar’ el trabajo del viernes por la noche. En su mayoría son todos estudiantes que dedican un momento de su tiempo para ‘donarlo’ a otros que más necesitan.
Adela Milanich y Roberto Da Silva son dos estudiantes universitarios que integran el grupo “El Buen Samaritano”. Ellos comentaron en el programa del CICSO “Tendiendo Redes” –que se emite todos los martes de 19 a 20 por FM “San Cayetano” 102.7mhz- que es maravilloso realizar esta experiencia.
“Nosotros sacamos mucho provecho de esta experiencia. Acá no sólo se trata de acercar un plato caliente a estas personas, en realidad esto es un pretexto, la intención nuestra es compartir con ellos sus vidas y las nuestras”, dijo Adela Milanich.
Más adelante manifestó que el grupo viene trabajando hace tiempo –más de cinco años- y por lo tanto ya conoce el ritmo de trabajo con estas personas.
“Al principio ellos nos tenían miedo, sobre todo con aquellos que tenían hijos, porque pensaban que nos ibamos a apropiar de ellos. Pero después se dieron cuenta de nuestras intenciones y hoy ya somos como parte de su familia”, indicó la joven.

¿Cómo nació?
El grupo “El Buen Samaritano” comenzó a ‘caminar’ en las comunidades de San Francisco Solano y de Nuestra Señora de La Merced, que son atendidas por los padres franciscanos.
El Padre Eugenio Ortiz, conocido por todos como “Pepo” –hoy ya no está trabajando pastoralmente en la Arquidiócesis de Corrientes- fue el encargado de invitar a los fieles a trabajar por esta noble causa.
En verdad, el proyecto de ese religioso, no sólo consistía en darle de comer al pordiosero, sino que también rescatarlo de ese lugar. Luego, por falta de recursos humanos y económicos, la idea general no prosperó.
De todos modos, esa semilla que depositó el Padre “Pepo” hoy es una realidad. Este grupo de jóvenes continúa trabajando con mucho ánimo y generosidad.

Tragos dulces y amargos
Trabajar con gente en la calle no es fácil. Así lo atestiguan los jóvenes universitarios. “Nosotros al ver esta realidad a veces nos choca. Me parece que hay que estar preparado física y mentalmente. Muchos de nosotros fuimos testigos de pequeños y grandes logros, pero también de desdichas”, señaló Roberto Da Silva.
“A veces pasa que vos te encariñas con alguien pero al mismo tiempo te das cuenta que sus fuerzas se están debilitando por el estado en que se encuentra su salud y vos no podes hacer nada. Eso es muy triste”, dijo emocionada Milanich.
En otro momento del diálogo Adela comentó que “muchas veces, en los diarios, nos enteramos que falleció un mendigo, y sin embargo esa persona era conocida nuestra”, acotó.

“Hoy vemos a pequeños que ya se drogan”

Como todos los viernes por las noches se encuentran recorriendo las calles céntricas de nuestra ciudad, ellos son testigos del consumo de drogas por parte de los menores.
“Hoy vemos en las calles como niños ya comienzan a inhalar bolsitas con “poxi”. Eso es lamentable, a nosotros nos asusta ver esas cosas”, dijo Adela.
“Nosotros no podemos hacer nada porque para eso es necesario gente preparada”, remarcó un integrante del grupo, y agregó: “esta problemática ya le fue informada a las autoridades de la Dirección de Minoridad y Familia”.