DEL PADRE LUIS NIELLA

El Reordenamiento Territorial “no
se trata de una repartija de tierras”

El Padre Luis Niella, quien hoy se encuentra trabajando en el Hogar de Capacitación Rural para Niños y Adolescentes en Riesgo, en el Departamento de Lavalle, explicó al CICSO de qué se trata cuando se habla de “Reordenamiento Territorial”. Como se sabe, en la actualidad se está hablando de que este tema sea incluido en la Reforma de la Constitución Provincial.

Mercedes (Enviado especial). – Él es palabra autorizada cuando se trata de hablar de cosas del campo. Además, su experiencia con nuestros hermanos campesinos, es realmente envidiable. Nos estamos refiriendo al Padre Luis Niella, quien hoy se encuentra trabajando en el “Hogar de Capacitación Rural para Niños y Adolescentes en Riesgo”, ubicado en el Departamento de Lavalle, más precisamente en Colonia “Juan Esteban Martínez”, a 3 kilómetros de Santa Lucía.
El Padre Niella participó recientemente en el Encuentro Provincial que se realizó en Mercedes sobre “Reforma Constitucional, Ordenamiento Territorial, Ambiente e Iberá”, y el CICSO aprovechó su amabilidad para conversar sobre estos temas y la realidad que hoy vive nuestros hermanos en el campo.
En primer lugar, el sacerdote comenzó aclarando el término “Reordenamiento Territorial”. Dijo que hace mucho tiempo la Iglesia viene hablando de este tema, pero no bajo estos términos, sino el de “Reforma Agraria”. “Hay un documento del Pontificio Consejo para Justicia y Paz del Vaticano de 1999 que lleva por título ‘Para una mejor distribución de la tierra, el desafío de la Reforma Agraria’, donde se plantea la tremenda necesidad del campesinado en el mundo, sobre todo en América Latina, y de una manera especial acá en Corrientes, de sentarse a conversar de estos temas”.

UN PLAN RACIONAL
Más adelante aclaró que “la Reforma Agraria no se trata de una repartija de tierras, como algunos quieren hacer creer, sino de un plan racional donde se crean verdaderos centros de población y que la gente pueda trabajar en el campo con todos los adelantos de la técnica moderna”.
En ese marco, el Padre comentó que en el Departamento de Lavalle “nosotros fundamos dos consorcios de campesinos: uno se llama ‘Juntos Podemos’ y el otro ‘Neike Chamigo’. En cada consorcio trabajan unas diez o quince personas y logramos conseguir un tractor con todos los implementos agrícolas. Quiero aclarar que son todos pequeños productores y, gracias a su labor, se triplicó la producción en la zona”, señaló con alegría.
Al ser consultado si hoy se carece de políticas de estado para con el campesinado, el consagrado respondió: “Existen pero no se llevan adelante con todo empeño. Nosotros por ejemplo estamos adheridos al Proyecto de Desarrollo Rural del Nordeste Argentino (ProDeRNea), pero lamentablemente nos entregaron el tractor hace unos tres años pero el seguimiento fue muy pobre. También se está trabajando mucho en la zona con el Programa Social Agropecuario (PSA), proporcionado por el Ministerio de la Producción. Este programa sí ha dado unos buenos resultados en la zona del Departamento de Lavalle. Es que la gente adquirió pequeñas cosas, como ser: carritos, caballos para arar, materiales de trabajo, se produjeron perforaciones para obtener agua potable en la casa. Se están consiguiendo muchas cosas pero a un ritmo muy lento”, señaló.

“Nuestro campesinado tiene deseo de progresar”

Mercedes (Enviado especial). – El Padre Luis Niella es fiel testigo de las ganas de progresar que tiene nuestro campesinado en los campos correntinos. “Yo estoy siempre en contacto con ellos. Existe mucha inquietud por parte de ellos. Hay mucha gente muy inteligente, muy capaz; a mí me han dejado admirado en la reunión del PSA y ProDeRNea, de la capacidad que tiene el campesinado correntino y del interés y el deseo de salir de su situación, y eso es muy importante”, comentó el sacerdote.
Pero también es una realidad que nuestros jóvenes ‘abandonan’ los pueblos para buscar ‘nuevos aires’ en las ciudades. “Nuestra gente del campo se queja de que la juventud se está yendo, y eso también es otra realidad. Ahora el gran problema en nuestra zona es que la producción es más que nada hortícola, y esta actividad, a veces, está supeditada a los vaivenes del mercado, entonces muchos de los pequeños productores se han fundido haciendo su siembra bajo cobertura plástica, lo que conocemos como invernadero, y solamente han podido sostenerse los grandes productores, porque los precios son sumamente inestables”, detalló.
“Hoy –prosiguió- la mayoría de los jóvenes están trabajando como peones hortícolas, por eso en la zona se puede decir que existe un verdadero proletariado rural”, concluyó.