CONCLUSIONES DEL AREA SOCIAL DEL CEN Xº

El X° Congreso Eucarístico Nacional (CEN) no sólo ha sido un acontecimiento de gracia para la provincia y el país, sino que ha sembrado semillas y recogido frutos a través de los miles de participantes que asistieron a nuestra ciudad para tal ocasión, y también mediante la colaboración desinteresada de las personas que prepararon, presentaron y compartieron sus ponencias en los numerosos centros de interés destinados a tal fin.Reflejo de esto son las conclusiones abordadas por la COMISIÓN DEL ÁREA SOCIAL, resultado del trabajo realizado en las charlas que tuvieron lugar durante el desarrollo del congreso. Entre ellas, resaltaremos:

ECONOMIA DE COMUNION

Esta propuesta se manifestó como otra respuesta al alcance para el problema social de la pobreza, y despertó mucho interés y esperanza, pues propicia la participación plena de los trabajadores, bajo la cultura de la legalidad, e implica a una comunidad de personas en la vida de la empresa, con la intervención del “socio oculto”, quien es el Eterno Padre.Es una nueva manera de vivir la economía, en particular desde la vida empresaria, donde todo circula, y también en la relación con los sindicatos, donde se promueve la colaboración lejos del conflicto. NO ES UNA NUEVA TEORÍA ECONÓMICA.Esto se puede lograr a partir de la aplicación del “dar Cristiano”, que implica gratuidad, amplitud para dar a todos, abundancia para dar a manos llenas, con alegría en el corazón, sabiendo dar para que haya un cambio, un dar organizado.El modo de vivir la economía depende de la cultura que queremos, y generando la cultura del dar, se podrá vivir la Economía de Comunión. Un dato que se resaltó es que estas empresas también tienen un gran celo por respetar la ecología, e incorporan el novedoso concepto de “utilidad para...”.Además, se está desarrollando una red solidaria mundial de empresas de Economía de Comunión, que ya cuenta con 800 comprometidas, 200 de las cuales pertenecen a América Latina, y 3 de ellas son de la región NEA, sumando un total de 50 en la Argentina.

ECOLOGIA Y DESARROLLO SUSTENTABLES

El análisis de las causas de los diversos problemas ecológicos actuales permitió reconocer que el obrar humano es el punto clave de la existencia de estos, al no respetar el orden natural. El hombre arrastra una falta de conciencia de las consecuencias de su conducta sobre sí mismo, sobre los otros y el medio ambiente, se olvida su condición de creatura y de la vinculación directa que mantiene con toda la creación, y desvaloriza la dignidad humana. Con estas actitudes, también permite el desarrollo científico y tecnológico sin fines perfectivos, y convive con la ausencia de un juicio crítico que a la luz del Evangelio, pueda discernir la importancia de su participación transformadora en la realidad, superando las tendencias, conductas, modelos y factores culturales que propician la cultura de la muerte.Es vital superar la evasión de la responsabilidad que tanto predomina en el ámbito cotidiano y profundizar los conocimientos de la Doctrina Social de la Iglesia que guía el camino para el crecimiento del Reino. “La eucaristía nos transforma internamente, personalmente, comunitariamente, pero también nos impulsa hacia la transformación, externa y social, que todavía está por cumplir en la vida”. (Borobio Dionisio. Eucaristía. Biblioteca de autores cristianos. Madrid 2000. Pág. 398)La conversión sincera trae consigo el compromiso y el protagonismo en la historia, que nos conduce a asumir la responsabilidad en el cuidado de los bienes creados y del uso que hagamos de ellos, como también de la vida misma.También se habló sobre el uso y tenencia de la tierra como un bien social, donde se abordó la dificultad actual que existe en el acceso a la tierra propia, y las constantes apropiaciones ilegales de terrenos fiscales que resultan como consecuencia de esta problemática.

POLITICAS SOCIALES Y PARTICIPACION CIUDADANA

Aquí el desafío se centró en encontrar cómo superar la cuestión asistencialista, práctica persistente de respuesta a las necesidades sociales de la actualidad, y los modos concretos en que se pueden realizar acciones de promoción y desarrollo humano para revertir esta cuestión.El asistencialismo, entendido como práctica de ayuda, eterniza la pobreza, la exclusión, y el clientelismo, por lo que es necesario reivindicar la asistencia como un bien de gran ayuda para muchas personas y familias que no poseen condiciones de vida de “igualdad razonable” para su alimentación y participación. Es necesario develar y denunciar las prácticas asistencialistas que no promueven la dignidad de la persona, sus capacidades, su autonomía y su derecho a tomar parte en su desarrollo pleno, ya sea personal, familiar o comunitario. El asistencialismo es una deformación de la asistencia. Su diferencia esencial radica en el modo de ver al otro como “objeto” o “sujeto”, protagonista de su propio desarrollo. También se notó un conocimiento acabado de las fortalezas y debilidades de cada una de las realidades de los congresistas; que con gran madurez no sólo cuestionaron sino que presentaron soluciones y políticas de trabajo adecuadas para su aplicación, y que mostraron interés en llevarse tanto experiencias como fórmulas de trabajo a sus lugares de residencia.