"El desafío de la integración"
Con el lema: “El Desafío de la Integración”, se llevó a cabo recientemente el V Congreso Federal de Economía Social en la ciudad de La Falda (Córdoba), organizado por el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES).
Una delegación de Corrientes estuvo presente en esa jornada, entre más de 2.000 representantes de cooperativas, mutuales, federaciones y confederaciones de todo el país.
Uno de los momentos más destacados de este Congreso Federal fue cuando distintos representantes de más de 60 cooperativas recuperadas de medios de comunicación de todo el país recibieron la noticia de ser reconocidas y así poder otorgarles las correspondientes matrículas oficiales aprobadas por el INAES. Cabe señalar que esa matrícula las habilita para funcionar como empresas sociales de servicio en todo el país.
Asimismo en esa jornada no pudo estar ausente el tema del proyecto de Ley de Radiodifusión.
A su vez, y con el objetivo de garantizar el trabajo en forma permanente y sustentable a los integrantes de las cooperativas y aquellos titulares de derecho pertenecientes a sectores de la población con alta vulnerabilidad social, se firmó convenios de cooperación con la Unión Misionera de Cooperativas de Trabajo (UMISCOOP) y con la Federación Correntina de Cooperativas de Trabajo Unidas (FECOTRAUN).
El empleo de los recursos
El Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia (DSI), en su capítulo séptimo ‘La Vida Económica’, en su apartado IV ‘Instituciones Económicas al Servicio del Hombre’, nos recuerda que “una de las cuestiones prioritarias en economía es el empleo de los recursos, es decir, de todos aquellos bienes y servicios a los que los sujetos económicos, productores y consumidores, privados y públicos, atribuyen un valor debido a su inherente utilidad en el campo de la producción y del consumo”.
Teniendo en cuenta ese concepto, las cooperativas tienen un papel muy importante de responsabilidad y capacidad en el país, consideradas como “cuerpos sociales intermedios”.
El papel del Estado
Según el Compendio de la DSI, “la tarea fundamental del Estado en ámbito económico es definir un marco jurídico apto para regular las relaciones económicas”.
Por otra parte “el Estado puede instar a los ciudadanos y a las empresas para que promuevan el bien común, disponiendo y practicando una política económica que favorezca la participación de todos sus ciudadanos en las actividades productivas”.
“En orden al bien común –señala el compendio-, proponerse con una constante determinación del objetivo del justo equilibrio entre la libertad privada y la acción pública, entendida como intervención directa en la economía o como actividad de apoyo al desarrollo económico”.
Con respecto a la función de los ‘cuerpos intermedios’, el compendio señala que “el sistema económico – social debe caracterizarse por la presencia conjunta de la acción pública y privada, incluida la acción privada sin fines de lucro. Se configura así una pluralidad de centros de decisión y de lógicas de acción”.
Finalmente resalta que “las organizaciones privadas sin fines de lucro tienen su espacio específico en el ámbito económico. Estas organizaciones se caracterizan por el valeroso intento de conjugar armónicamente eficiencia productiva y solidaridad”.
Con el lema: “El Desafío de la Integración”, se llevó a cabo recientemente el V Congreso Federal de Economía Social en la ciudad de La Falda (Córdoba), organizado por el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES).
Una delegación de Corrientes estuvo presente en esa jornada, entre más de 2.000 representantes de cooperativas, mutuales, federaciones y confederaciones de todo el país.
Uno de los momentos más destacados de este Congreso Federal fue cuando distintos representantes de más de 60 cooperativas recuperadas de medios de comunicación de todo el país recibieron la noticia de ser reconocidas y así poder otorgarles las correspondientes matrículas oficiales aprobadas por el INAES. Cabe señalar que esa matrícula las habilita para funcionar como empresas sociales de servicio en todo el país.
Asimismo en esa jornada no pudo estar ausente el tema del proyecto de Ley de Radiodifusión.
A su vez, y con el objetivo de garantizar el trabajo en forma permanente y sustentable a los integrantes de las cooperativas y aquellos titulares de derecho pertenecientes a sectores de la población con alta vulnerabilidad social, se firmó convenios de cooperación con la Unión Misionera de Cooperativas de Trabajo (UMISCOOP) y con la Federación Correntina de Cooperativas de Trabajo Unidas (FECOTRAUN).
El empleo de los recursos
El Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia (DSI), en su capítulo séptimo ‘La Vida Económica’, en su apartado IV ‘Instituciones Económicas al Servicio del Hombre’, nos recuerda que “una de las cuestiones prioritarias en economía es el empleo de los recursos, es decir, de todos aquellos bienes y servicios a los que los sujetos económicos, productores y consumidores, privados y públicos, atribuyen un valor debido a su inherente utilidad en el campo de la producción y del consumo”.
Teniendo en cuenta ese concepto, las cooperativas tienen un papel muy importante de responsabilidad y capacidad en el país, consideradas como “cuerpos sociales intermedios”.
El papel del Estado
Según el Compendio de la DSI, “la tarea fundamental del Estado en ámbito económico es definir un marco jurídico apto para regular las relaciones económicas”.
Por otra parte “el Estado puede instar a los ciudadanos y a las empresas para que promuevan el bien común, disponiendo y practicando una política económica que favorezca la participación de todos sus ciudadanos en las actividades productivas”.
“En orden al bien común –señala el compendio-, proponerse con una constante determinación del objetivo del justo equilibrio entre la libertad privada y la acción pública, entendida como intervención directa en la economía o como actividad de apoyo al desarrollo económico”.
Con respecto a la función de los ‘cuerpos intermedios’, el compendio señala que “el sistema económico – social debe caracterizarse por la presencia conjunta de la acción pública y privada, incluida la acción privada sin fines de lucro. Se configura así una pluralidad de centros de decisión y de lógicas de acción”.
Finalmente resalta que “las organizaciones privadas sin fines de lucro tienen su espacio específico en el ámbito económico. Estas organizaciones se caracterizan por el valeroso intento de conjugar armónicamente eficiencia productiva y solidaridad”.
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